A partir del proceso de repoblación con cristianos viejos que tomaron posesión de las propiedades de los moriscos, un grupo procedente de la huerta murciana, hablantes del ‘panocho’, se estableció en Istán, influenciando así el gentilicio local. Este cambio demográfico marcó el inicio de un nuevo modo de vida, cuyo sistema social actual tiene sus raíces en aquellos pobladores. Las acequias, de origen musulmán, son uno de los principales atractivos del municipio, distribuyendo agua para el riego de huertas y bancales que rodean la localidad, y representan el ingenio árabe para canalizar el agua con fines humanos.

Las acequias, esenciales en el paisaje de Istán, continúan siendo vitales para el riego tradicional de las huertas, formando un intrincado sistema que atraviesa el subsuelo de muchas calles. La ‘Acequia del Chorro’, en particular, destaca por su ruta escénica desde el nacimiento del Río Molinos, ofreciendo una belleza natural incomparable.